En un aparatoso despliegue los reos fueron llevados en cinco autobuses custodiados por 500 elementos de Seguridad Penitenciaria y 400 de Fuerza Civil, a bordo de 30 vehículos de seguridad y un helicóptero
Monterrey, Nuevo León.- Como parte de las acciones del gobierno de Nuevo Leónpara mantener la gobernabilidad de sus penales, se trasladaron 128 internos de los centros penitenciarios estatales a prisiones de otras partes del país.
A través de un comunicado, se informó que la Agencia de Administración Penitenciariarealizó el operativo hacia los estados de Nayarit, Sonora y Morelos en colaboración con cerca de mil elementos de distintas corporaciones.
Fueron reubicados 75 varones del Cereso número 1 de Apodaca, cinco del Cereso 2 también en ese ayuntamiento; 38 del Cereso 3, de Cadereyta y 10 mujeres del Cereso Femenil.
Los hombres fueron trasladados al Cefereso número 4 de Tepic, Nayarit, y al Cefereso 11 de Hermosillo, Sonora, y la totalidad de las mujeres en el Cefereso 16 de Coatlán del Río, Morelos”, informó el escrito.
En el aparatoso despliegue los reos fueron llevados en cinco autobuses custodiados por 500 elementos de Seguridad Penitenciaria y 400 de Fuerza Civil, a bordo de 30 vehículos de seguridad y un helicóptero.
“Esta es una medida más desde que inició la estrategia estatal para la pacificación del sistema penitenciario de Nuevo León”, subrayó el gobierno estatal.
Recordó que los traslados comenzaron en noviembre del 2018 con internos del Cereso número 3, antes Cadereyta
Previo a los traslados de este lunes, la organización Reinserta ofertó una capacitación a 15 elementos de Seguridad Penitenciaria del Cereso Femenil, con enfoque de no violencia.
Los traslados también contaron con la participación de funcionarios de la Comisión Estatal de Derechos Humanos y la organización Comparte.
El cierre del penal del Topo Chico, el año pasado, luego de 76 años de historia también formó parte de esta estrategia de pacificación.
