El compuesto atacaría directamente las proteínas KAT6A, responsables del desarrollo del cáncer.
El Dr. Tim Thomas y la Dra. Anne Voss del Instituto Walter, desarrollaron un medicamento capaz de detener la propagación del cáncer en el cuerpo, pues ataca directamente a las células cancerígenas, deteniendo su multiplicación.
Este compuesto afecta directamente las proteínas KAT6A y KAT6B, responsables de la enfermedad, agotándolas hasta el punto que dejan de reproducirse, lo que acabaría definitivamente con el padecimiento; por lo menos eso es lo que se ha observado en animales afectados por linfoma.
Esta medicina aún está en etapa preliminar, lo que significa que aún no pasa a su etapa de experimentación en humanos; no obstante, los investigadores se muestran muy optimistas de lo que se ha logrado hasta el momento.
El medicamento no mata a las células cancerígenas
Algo que señalaron los científicos es que este medicamento no mata a las células cancerígenas, estas se mantienen activas dentro del cuerpo; sin embargo, ya no realizan ninguna función, por lo que no representan algún peligro.
Podría decirse que están en estado de animación suspendida. Si bien a muchos les puede parecer un método un tanto frágil para hacer frente al cáncer, señalan que a la larga esto sería más adecuado que los tratamientos agresivos de la actualidad.
La radiación y quimioterapias, aunque matan a las células portadoras de la enfermedad, también afectan el ADN de la persona, modificándolo; lo cual puede traer diversos efectos secundarios, además de que existe la posibilidad que el padecimiento regrese.
Si bien tener células con cáncer dormidas en el cuerpo también implica un riesgo de reactivación, sería muy raro que sucediera de acuerdo a sus análisis; y en dado caso de que hubiera una recaída, se podría dar hasta muy avanzada edad.
Con información de IFLScience.