El abogado fiscalista Pablo Castañeda explicó que el “afortunado” ganador no sólo tendría que pagar dicha cifra sino que además tendría que informar al SAT.
El que resultara ganador del avión presidencial, en la rifa que plantea el presidente Andrés Manuel López Obrador, pagaría 24 millones de Impuesto Sobre la Renta (ISR), aseguró el abogado fiscalista Pablo Castañeda Romero.[X] Close
El abogado fiscalista explicó que el “afortunado” ganador no sólo tendría que pagar dicha cifra sino que además tendría que informar al SAT sobre el premio e incluirlo en su declaración anual con las obligaciones fiscales que esto implica.
“Considerando que el avalúo aproximado del avión es de 130 millones de dólares, tomaremos esto como valor del premio y el tipo de cambio lo dejaremos en 18.50, nos da un valor de 2,400 millones de pesos, si a esto le aplicamos el 1% obtendremos los 24 millones”, explicó.
Detalló que el impuesto por los premios de las rifas organizadas en México, se calculará multiplicando el valor del premio por el 1% y sin meter deducción alguna.
Castañeda Romero refirió que el artículo 137 de la Ley del Impuesto Sobre la Renta (LISR), considera ingreso por premio las loterías, rifa, sorteos, en este caso es una rifa.
Y este ingreso no está exento de obligaciones fiscales, a diferencia de cuando son premios de la Federación, estos se consideran exentos cuando son para promover los valores cívicos.
“Lamentablemente el ganador pagaría 24 millones de ISR, o si el gobierno lo absorbe, pagaría 8.2 millones”, expresó.
Hace unos días, el presidente de México Andrés Manuel López Obrador, planteó la posibilidad de rifar el avión presidencial, en 500 pesos por boleto, a falta de comprador.
EL CACHITO SALE CARO
De acuerdo con el Banco Nacional de Obras y Servicios (Banobras) al cierre del 2019 el gobierno mexicano gastó mil 833 millones de pesos en el pago de deuda más intereses del avión presidencial.
Además de un remanente de deuda de más de dos mil 700 millones de pesos, lo cual se tendría que pagar hasta 2027.
Tan sólo en el año en que el gobierno mexicano mantuvo en California la aeronave Boeing 787 en el aeropuerto de logística Victorville, en San Bernardino, California, se erogaron 13 millones de pesos para su preservación y 15 millones de mantenimiento.