Mario Alberto y Gladis Giovanna, presuntos responsables del secuestro y asesinato de la niña Fátima, confesaron a la tía de él las razones por las que cometieron el crimen.
De acuerdo con un reportaje de Noticieros Televisa, la pareja en compañía de sus tres hijos, se trasladaron al municipio de Isidro Fabela, en Estado de México, en donde pidieron a Irma Reyes, tía de Mario, les rentara un cuarto, a lo cual ella accedió.
Ellos se hospedaron ahí para esconderse luego de cometer el asesinato. Fue el miércoles por la mañana cuando la tía vio en las noticias que las autoridades buscaban a la pareja por el asesinato de la niña Fátima, entonces los confrontó y confesaron todo.
Según Irma Reyes, Giovana accedió a secuestrar a la niña para que su pareja no abusara sexualmente de sus propias hijas, pues le aseguró “que él quería una niña para hacerla su novia, para toda la vida, quería un regalito, sino agarraría a una de sus hijas”.
Cuando ambos se dieron cuenta de que buscaban a Fátima, la mujer mató a la pequeña con unos cinturones que le proporcionó Mario.
De acuerdo con Noticieros Televisa, Irma Reyes Castañeda fue quien denunció a Giovana y a su sobrino Mario.
