La reducción de las actividades al aire libre y la constante exposición a dispositivos electrónicos provoca los trastornos de sueño
Desde el 21 de marzo, cuando la Secretaría de Educación Pública (SEP) determinó suspender las clases en las escuelas del país, debido a la pandemia de coronavirus, millones de niños vieron afectadas sus rutinas. A algunos esto les ha provocado trastornos del sueño, de acuerdo con un estudio.
La pandemia ha modificado los hábitos de sueño de los niños. Según los resultados de un estudio realizado en China y publicados a finales de junio en el Journal os Sleep Research, el confinamiento ha hecho que al dormirse tarde y despertarse tarde, los menores vivan en un constante horario de vacaciones.
Según el estudio, rescatado por el noticiero ‘En Punto’, la alteración en patrones establecidos de inicio no permite la comprensión, provoca irritabilidad y cansancio.
Además, los investigadores detectaron que la reducirse las actividades al aire libre, las comunicaciones cara a cara e incluso recibir menos luz solar, aunado a la constante exposición a dispositivos electrónicos ocasiona trastornos que pueden derivar en situaciones de:
– Insomnio
– Terrores nocturnos
– Sonambulismo
La recomendación médica es que los niños empiecen a dormir cada día media hora más temprano, hasta regresar a sus horarios habituales, en particular frente al inicio de las clases en línea.