Así impacta la pandemia los festejos guadalupanos en ‘El Pichón’
Un gigantesco operativo se ha montado en las instalaciones de ”El Pichón” para garantizar que todos los feligreses cumplan con las medidas de uso de cubrebocas y sana distancia al venerar a la Virgen de Guadalupe, en lo que parece será una celebración sobria y desolada.
Por: Fernando Ulloa Pérez | Misael Ulloa Isiordia
A unas horas de que se lleven a cabo los tradicionales festejos de la Virgen de Guadalupe, en estos momentos decenas de agentes de la Policía Estatal y de Protección Civil del Estado y del municipio, además de rescatistas voluntarios, se encuentran resguardando las entradas principales de la Barranca del Pichón.
De acuerdo a los declarado por los mandos policíacos que se encuentran en los módulos de vigilancia, las indicaciones de sus superiores son evitar que en las inmediaciones del templo se presenten aglomeraciones de peregrinos, además se les esta exigiendo a los visitantes que usen cubrebocas, antes de ingresar a la zona se les checa la temperatura y se les esta aplicando gel antibacterial.
La explanada del templo luce vacía, sin vendedores ambulantes, los restaurantes del lugar se encuentran cerrados, solo se aprecia la vendimia de una familia que desde hace años viven en esta zona de la ciudad.
En la entrada principal del templo se encuentran jóvenes elementos de Protección Civil, quienes de manera amable y cordial piden a los escasos peregrinos que guarden la sana distancia, además de señalarles las salidas del templo.
Los uniformados a bordo de motocicletas recorren los caminos de llevan al templo donde año con año se venera a la Virgen de Guadalupe.
En el atrio del templo, comerciantes establecidos ofrecen a la venta imágenes y estatuillas de la Guadalupana, a un costado mujeres indígenas tienen en exposición artesanías que ellas mismas elaboran a mano.
En las bancas del templo lucen cintas amarillas que indican que los peregrinos no pueden sentarse ni permanecer mucho tiempo en el interior de sagrado recinto.
A escasos metros de donde se encuentra el altar de la Virgen de Guadalupe y sobre unas mesas de madera de cedro se aprecian varios canastos bordados en tela aterciopelada en color tinto como clara señal de que será ahí donde los peregrinos podrán depositar sus limosnas.
A un costado de las bancas se encuentran cajas metálicas con letrero que reza; “Ayuda para la pintura gracias”.
Sobre la cinta asfáltica de la autopista se pueden apreciar varias patrullas y ambulancias con paramédicos que están preparados para atender cualquier tipo de contingencia.
Los acotamientos de la autopista se encuentran vacíos y libres de vehículos, los trabajos de prevención son supervisados por algunos jefes policíacos.