Un hombre de 41 años estaba comiendo palomitas de maíz cuando la cascara del grano de una de ellas se le atoró en los dientes; instintivamente trató de sacarla con varios objetos, pero no lo logró. La irritación en las encías se convirtió en infección.
Por intentar sacar el residuo con un palillo de madera, una pluma, un pedazo de alambre y un clavo, Martin se lastimó la zona y, además, trasladó hasta ahí bacterias totalmente ajenas que entraron al torrente sanguíneo y causaron una afección llamada endocarditis, la inflamación del revestimiento interno de las cámaras y válvulas cardíacas.
Los primeros síntomas de infección llevaron a Martin a visitar al médico que le recetó algunos medicamentos y lo envío a casa, sin embargo, las molestias seguían y tuvo que acudir a un hospital en donde detectaron que algo andaba mal más allá de la boca, pues la infección se había trasladado al corazón. Más noticias: www.planoinformativo.com