Al menos 8 familias chinas han tenido que pagar hasta 50 millones de pesos por los supuestos secuestros de sus hijos.
Autoridades australianas y chinas están trabajando en conjunto para investigar una serie de extorsiones de las que han sido víctimas al menos ocho estudiantes que fueron obligados a fingir sus secuestros virtuales bajo amenazas.
De acuerdo con información difundida por 20 Minutos, los jóvenes de origen chino que viven y estudian en Sidney, Australia han sido engañados por delincuentes que fingen trabajar en el gobierno australiano y los amenazan con expulsarlos del país por supuestas actividades ilícitas.
Los extorsionadores contactan a las víctimas, hablando siempre en mandarín, para pedirles dinero a cambio de no difundir información que supuestamente involucraría a los jóvenes en un crimen que finalmente provocaría su extradición y la pérdida de sus estudios, además de otras consecuencias legales.
Una vez que los delincuentes convencen a los estudiantes, los obligan a fingir un secuestro y enviar mensajes a sus familiares informando sobre la situación, además de fotos en las que aparecen amagados. Es ahí cuando el fraude económico se concreta, pues empiezan a pedir fuertes cantidades de dinero.
Los pagos para el rescate de los estudiantes han oscilado entre los 440 mil y los 50 millones de pesos (20 mil y los 2 millones de dólares). Las extorsiones alcanzan las cantidades antes mencionadas debido a que, tras la primera transacción, las amenazas continúan ocurriendo y las víctimas tiene que seguir pidiendo dinero por su propio rescate.
Los estafadores seleccionan a jóvenes chinos aprovechando su poco arraigo en Australia y la falta de un sistema de apoyo en el lugar. En mayo del presente año, la policía australiana alertó por primera vez de esta clase de operaciones delictivas.